Tiempo de cambios, donde tenemos cambios sin tiempo. Porque por mas que por nosotros los dias pasen, sentimos igual. Todavia vivimos igual. Dia tras dia, intentando saber cada dia un poco mas de nuestras propias vidas. E intentamos cambiar esas cosas que no nos gustan, y acaban siendo las unicas, que, al final, siguen siendo igual. Igual que al principio.
Pasamos dias con deseos incumplidos, apenas autorevelados y sin resolver. A nuestro alrededor puede que el sol brille, que las flores esten marchitandose o que haga frio. Que mas da, si nada de eso nos cambia. Si nuestros defectos son los mismos, nuestras alegrias cada vez mas grandes (o pequeñas) y nuestros corazones siguen queriendo latir a un ritmo siempre un poco mas rapido que el de ayer.
Queremos creer que la cabeza manda, pero es mas abajo donde estan las riendas. Hoy seremos un poco mas cinicos que ayer. O un poco mas independientes. Todo por intentar salvarnos de lo que no tiene salvacion porque ya venimos tarados de fabrica, ya venimos predispuestos a caer en sus trampas. Da igual el camino por donde se llegue, porque el resultado es siempre el mismo.
Claro que existe esa opcion de querer creer que a ti, hoy, no te va a tocar. Pero no hay modo de saber si va a ser asi. Y, para tu desgracia, lo mas facil es que yo tenga razon, y tu, no.
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