28.1.11

Abre los ojos.

Me siento engañada. Estafada por un mundo que no es lo que me contaron que era. Un mundo que me enerva, viendo como en otras partes del mundo la gente lucha por derechos que aquí tenemos asumidos, y nos quejamos de vicio. La gente en otras partes del mundo pone su vida en la calle, en manos de su gente, para ser libre, para poder VIVIR. Y aquí estamos con tonterías, con que el mundo no es justo, con que no hacemos mas que SOBREVIVIR.
Es que no podemos ver, no podemos oír, no podemos sentir como esas personas, que podríamos haber sido cualquiera de nosotros, que solo se diferencian en haber nacido en otro país, en otra cultura; no podemos prestar atención a su lucha, a su pasión por la libertad, a su grito por la libertad. A su forma de decir ''¡Basta ya, no queremos dejarnos dominar!''. Y podríamos aprender tanto de ellos. Que nos podrían enseñar como luchar por una felicidad mas real que esta felicidad consumidora que nos venden en las supermercados, empaquetada, envuelta en celofán. ¡Que nos tienen engañados, atrapados! Que aquí también nos dominan, joder, vaya si lo hacen, pero aquí han aprendido a hacerlo de forma que nadie se entera. Y a todos se nos olvido como luchar contra ello. Pues toda esa gente, luchando por su libertad, en una explosión de sentimiento, podría recordarnos como se hace. 
Pero aquí somos como borregos, agachamos la cabeza, cerramos los oídos a lo que viene de afuera, y los ojos a lo que ocurre a nuestro alrededor.
Y además, nos quejamos de vicio.

3 comentarios:

  1. S I N P A L A B R A S !

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  2. No te haces idea del cabreo que llevaba encima cuando escribi esto¡

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  3. este ya lo había leído... ya hablaremos cuando vuelvas a casa jovencita... ajajajaja!!!! (es broma) de tu estilo!

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